Esta mañana mientras trabajábamos y nos tomábamos nuestro acostumbrado café, en un Bistro, en San Juan (exquisito por si acaso), a mi lado pasó una madre con su hija…
Desde la entrada al pasillo escuchaba a la mamá regañándola, diciéndole algo que tenía que ver con amarrarse el zapato o las tenis o algo así…
Mientras “me hacía” que estaba escuchando a Candelaria ( mi esposo, partner, etc) ( “me hacía”jajajaja, porque quiero estar en todos lados a la misma vez) realmente estaba tratando de entender que podía ser tan malo como para regañar a una niña adolescente frente a toda la gente porque no tenía bien amarrado un zapato…
Ya al final cuando me pasan por al lado, lo que escucho es a la madre diciéndole a la niña; “Ya que no me haces caso lo que me dan ganas es de agarrarte por el pelo y darte un cantazo” ( y algo más pero no alcancé a escuchar)...
Entonces ahí, justo en ese momento, mi mente se fue a otro nivel… (Mientras Candelaria seguía hablando... jajaja)
Me pregunté: -¿por qué razón hay que decirle algo así a una adolescente?…
-Le hablaré yo así a mi hijo sin darme cuenta?
No conozco la historia de esta chica con su mamá, pero a la misma vez pienso; Yo haría exactamente lo mismo que estaba haciendo la chica con su madre… ignorándola… haciendome que no es conmigo... imagínate si cada vez que habla lo que sale por su boca son esas palabras, lo menos que haría yo es ignorarla…
Yo como pasada adolescente, muchas veces pienso en todo lo que viví, en lo hiriente que pueden ser y fueron unas palabras en mi vida…
Ahora después de “vieja” (con casi 40 jajaja) es que vengo a entender muchas cosas y palabras que mientras uno crece y pasa por la adolescencia no asimila y las toma bien personales.
Ahora como madre que soy hoy, de un adolecente, no te digo que alguna vez entre el desespero y el coraje haya dicho cosas que luego no debí decir…(a mi hijo, a mi esposo, a la gente) y muchas veces me arrepiento , pido disculpas (que es lo más difícil de hacer, perdir perdon!)… y otras veces digo; “pues ya pa’ qué”… me quedo con la espina de lo que pude haber dicho mejor,
Y entonce pregúntese ¿Cómo quieres hablarles a tus hijos… como madre y padre, que quieres transmitir? ¿Tus corajes? ¿Tus frustraciones? ¿Tus deseos de que sean de una manera o de otra?
La verdad es que todos en algún momento fallamos, nos dejamos llevar por el amor que le tenemos a nuestros hijos y lo ciego que somos a la hora de implementar disciplina (por eso muchas veces buscamos terceros que nos den apoyo en ese rol)…
Pero para mi, no hay la forma correcta, ni la incorrecta… la forma que es… es la que funciona para ti y tus hijos…
Hablarle con ejemplos, hablarle con relatos, hablarle con historias… o con números… no sé… lo que haga que llegue el mensaje de una forma natural y SALUDABLE.
Lo que sí puedo decirte es que analices cada palabra que saques por tu boca, analiza si para ti, a esa edad que tiene tu hijo, sería algo positivo, constructivo, o sería de las que te decían y entraban por un oído y salían por el otro…
Háblale sin prejuicios, háblale con honestidad, háblale de la forma que tanto te gustaría que te hablaran a ti, créeme que con eso será suficiente.
Las palabras que dices hoy, son las que forman el caracter de ellos en el futuro.
Un gran apoyo para esto y mucho más lo conseguirás en el taekwondo, esta disciplina nos ayuda a desarrollar pasciencia y autocontrol a todos en la familia. Si deseas conocer más de nuestros programas visita www.tkdcenterpr.com o llama al 787-461-5385, 787-688-7423.
Doriliz Pérez II Dan
Athletic Taekwondo Center
Hato Rey PR
787-461-5385
Me encanta este post pues refleja la realidad de ser padres! Nadie nos prepara para ello y no hay respuestas certeras solo el no sentirte incomodo cuando miras a tu hojo por algo que le dijiste. Nos educamos con practicas de crianza que culturalmente tienden hacia lo autoritario sin embargo la literatura señala que el estilo de crianza democratico es el que ofrece mejores resultados para una vida futura. Proveer estructura y organizacion, ser firmes pero a la vez ser flexibles y tomar en cuenta la opinion de nuestros hijos. No es facil pero tampoco imposible, lo mas importante reflexionar sobre nuestras acciones y no pensar que lo sabemos todo. Echar palante necesario